Reflexiones sobre una oración bíblica y Cristocéntrica.
Pregunta:
¿Por qué nosotros en el Rosario repetimos oraciones, si en la Biblia Jesús prohibió que repitiéramos palabras al orar? Un hermano separado me dijo que eso estaba muy mal y que nada del rosario es bíblico. ¿Qué podría contestar?
Respuesta:
Es sumamente importante que como católicos, siempre estemos dispuestos a dar razones de nuestra fe (1 Pe 3,15) y presentemos los fundamentos bíblicos de ello. En este caso el Papa Juan Pablo II en su reciente encíclica sobre el Rosario ha hecho un llamado a que presentemos los fundamentos bíblicos del mismo para mostrar su riqueza espiritual y su validez pastoral (Cfr. Rosarium VirginisMariae No. 43) Con alegría te comparto algunas de las respuestas católicas inmediatas que hemos dado a eso:
1.- Jesucristo nos puso el ejemplo de rezar así.
Es falso que la Biblia prohíba repetir palabras en la oración. Cuando en el Evangelio de San Mateo Jesús dice que no se hable tanto en la oración, en ese mismo versículo aclara que se refiere a los paganos que creen que por hacer tanta palabrería van a ser escuchados.
El rechazo no es a “repetir palabras” sino al hacerlo sin sentido interior y profundo, pensando que la fuerza esta en la repetición de palabras, como lo haría un pagano.
Si alguien te dijo eso, sería muy bueno que le comentaras que el mismo Señor Jesucristo nos puso el ejemplo al rezar ‘repitiendo palabras’.
Esto fue lo que sucedió. Era uno de los momentos más importantes en la vida de Nuestro Señor Jesucristo, pues él sabía que había llegado la hora de entregarse para salvación del hombre. Es la oración del Huerto de Getsemaní. ¿Cómo fue su oración? Veamos lo que la Biblia nos dice:
“Se alejó de nuevo a orar, repitiendo las mismas palabras” Mc 14,39
Si Jesucristo oró “repitiendo las mismas palabras” entonces también nosotros lo podemos hacer. A menos que alguien diga que también Jesucristo hizo mal al hacerlo así. Aunque usted no lo crea, algunos serán capaces de decir eso con tal de no reconocer su equivocación.
2.- Los Salmos tienen oraciones repetitivas.
Al parecer muchos hermanos protestantes no han leído atentamente la palabra de Dios, pues en ella encontramos que varios salmos de la Biblia son oraciones que tienen partes que se van repitiendo cada dos o tres versículos. Eso era algo muy común en la Biblia. Por ejemplo:
El salmo 29 Repite: “Voz de Yahvé”.
El salmo 46 Repite: “Con nosotros Yahvé rey de los ejércitos”.
El salmo 80 Repite: “Oh Dios haznos volver”.
El salmo 107 Repite: “Den gracias a Yahvé”.
3.- Por supuesto que el Rosario es una oración bíblica.
* En el Rosario “repetimos palabras” así como Jesús lo hizo. Mc 14,39
* El Padre Nuestro está en la Biblia. Mt 6,9-13
* Gran parte del Ave María está en la Biblia. Lc 1,28-55: Jn 2,1-11
* El Gloria (Alabanza trinitaria) está en la Biblia 2 Cor 13,13-14
4.- Los ‘misterios’ del Rosario en su mayoría son pasajes bíblicos:
Misterios gozosos:
Primer misterio: La Encarnación del Hijo de Dios Lc 1,26-38
Segundo misterio: La Visita de María a Isabel Lc 1,39-45
Tercer misterio: El nacimiento de Jesús Lc 2,1-7
Cuarto misterio: La Presentación del niño Jesús Lc 2,22-34
Quinto misterio: Perdido y hallado en el templo Lc 2,41ss
Misterios Dolorosos:
Primer misterio: La oración de Jesús en el Huerto Mc 14,32-38
Segundo misterio: La Flagelación de Jesús Mc 15,15
Tercer misterio: La Coronación de espinas Mc 15,16-19
Cuarto misterio: Jesús con la Cruz a cuestas Mc 15,21-22
Quinto misterio: Crucifixión y muerte de Jesús Jn 19,18-30
Misterios gloriosos:
Primer misterio: La resurrección de Jesucristo Mt 28,1-6
Segundo misterio: La Ascensión de Jesús Mc 16,19-20
Tercer misterio: La Venida del Espíritu Santo Hech 2,1-4
Cuarto misterio: La Asunción de María Cant 6,10
Quinto misterio: La coronación de María Ap 12,1ss
Misterios de la Luz
1.- Su Bautismo en el Jordán Mc 1,9-10
2.- La autorrevelación en las bodas de Caná Jn 2,1-11
3.- El anuncio del Reino de Dios invitando a la conversión Mc 1,15
4.- La Transfiguración Mc 9,2-8
5.- La Institución de la Eucaristía. Lc 22, 19
Aunque a muchos no les agrade o piensan que no hay que hacerlo, sí hay algo bíblico, eso es el Rosario, con las evidencias bíblicas que ya lo hemos mostrado.
Además, ¿acaso a una esposa le molestará que su marido le diga una y otra vez: “te quiero mucho” “te quiero mucho” “te quiero mucho”… ? Por supuesto que no, sino todo lo contrario.
De igual manera el Rosario es un “ramillete de rosas” para María, pidiendo su intercesión y glorificando a Nuestro Señor Jesucristo.
El Rosario gira alrededor de la persona de Jesucristo.
Gracias por escribirnos y esperamos que sigas creciendo en el conocimiento de tu fe para poder vivirla y defenderla.
Reza el Rosario. Te lo recomiendo.
Autor: Martín Zavala, Misioneros de la Palabra