Sr. Director de El HERALDO
Agosto 9 del 2005
Ahora con la abundancia de tantos predicadores religiosos que se autollaman cristianos pero no católicos, es frecuente que nos cuestionen a los católicos con temas como el que me tocó atender con uno de ellos en esta forma:
Me decía el hermano cristiano no católico que él “no creía en santos”, solamente en Dios y su Hijo Jesucristo. Al respecto le interrogué:
¿ Cómo conoce Ud. La vida y enseñanzas de Jesucristo en quien dice creer?, me contesta: “ por la Biblia y al efecto me mostró ésta en los evangelios que tenían como título “ Evangelio según San Mateo, S. Marcos, S. Lucas, S. Juan….”
Le repliqué: entonces ¿ Si Ud. no cree en santos, solamente en Jesucristo ¿ cómo entonces se está basando para ello en escritos de Santos como los que me acaba de mostrar? ¿no le parece que Ud. mismo se contradice?
Me dijo entre otras palabras: “ Es que esto es Palabra de Dios y fue escrito por dichos personajes que estuvieron con Cristo, por eso lo creo…”
Le volví a preguntar ¿ Ud. nada más cree en lo que está en la Biblia?, el Predicador me dijo que así era, sólamente creía “ lo que en la Biblia consta?”
Le comenté: Me sigue pareciendo incongruente su actitud, por la siguiente razón:
En la Biblia no consta que los escritos (evangelios) que Ud. me muestra son de S. Mateo, S. Marcos, S.Lucas y S. Juan sean precisamente de ellos. Estos escritos son anónimos. Quien definió su autoría fue la Iglesia Católica, basada en la Tradición y dictaminado oficialmente lo anterior en Concilios tan antiguos como el de Cartago (siglo IV). El editor de su Biblia, se basó en dicho dictamen para anotar ese dato en ella y que dice: “según San…” ¿ Cómo entonces, atiende Ud. un dictamen eclesiástico y no bíblico?
Abundé haciéndole notar que:
El título de “Santo” que se refiere a los Evangelistas del editor de su Biblia versión Valera, no está en el texto original griego y procede, para mayor confusión de su tésis: biblica única regla de fe… también por dictamen del catolicismo y no de la Biblia. Le comenté algo más:
¿ Por que el cristiano evangélico acepta la santidad en esos personajes del siglo I y el nombre de quien poseen esa cualidad y ya no vuelve a tener registro de más santos en los mismos términos, citándolos con sus nombres en los siglos, que van del II al actual XXI?. ¿ que su Iglesia se congeló en esta particularidad de formar santos y registrarlos desde el remoto siglo I de la era cristiana, hasta la actualidad?.
Terminó el diálogo con el predicador con la retirada de él, sin responderme, según mi concepto, algo objetivo a lo aquí tratado.
Sr. Director de El HERALDO
Agosto 9 del 2005
Comentaba en otra aportación a esta gustada sección, que:
Un predicador cristiano no católico me cuestionaba que no era bíblico invocar a los santos, ya que según él, estos personajes están muertos. Afirmaba que por muy recta que hubiera sido su vida y sus virtudes, nada pueden hacer por nosotros, ya que el único Mediador para los seres humanos es N.Sr. Jesucristo.
Le repliqué al predicador que:
Muchos no católicos tienen una idea incorrecta de lo que ellos “creen” es doctrina católica sobre la invocación de los santos. Al efecto le comenté:
Los católicos creemos como la Biblia lo dice : Que el Unico Mediador entre Dios y los Hombres es Jesucristo, esto es una verdad, que no se opone a otra verdad, que detallé más o menos así:Los cristianos no católicos no se turban por solicitarles a sus hermanos en la fe que oren por ellos en alguna petición. Me consta, por que lo he visto en sus templos y en lo personal.
El predicador me dice que así es, pero es entre personas vivas, no muertas.
Lo invité a considerar que la Biblia nos enseña que Dios es un Dios de Vivos y no de Muertos , Jesús así lo aseguró Luc.20,38. San Juan en el Apocalipsis ve “a los muertos” en actitud de vivos y hasta orando por sus hermanos en la fe Apoc.6,9. Jesús cuando se transfigura en el monte Tabor muestra a sus apóstoles a Moisés vivo y hablando con El, a pesar de que ya tenía muchos años de muerto. Cuando Yahvé se hace presente en la zarza ardiendo ante Moisés, se identifica como “ El YO SOY el Dios de Abrahám, de Isaac y de Jacob…”, no dice “ yo fui “ como sería si para el Altísimo esos patriarcas estuvieran muertos. Para Dios estaban vivos, a pesar de que físicamente esos importantes personajes bíblicos hacían muchos años habían fallecido.
Si esto sucedió en la Antigua Alianza más imperfecta que la Nueva en Cristo con el Pueblo de Dios, con más razón, debe manifestarse en la Nueva que se inaguró con la sangre de N.Sr. Jesucristo. Heb.1,1,3.
Por eso, los católicos, confiados en esta Palabra de Dios, invocamos a los santos que fueron engendrados por la fe en Cristo desde el siglo I de la era crisiana y los demás de los siglos siguientes hasta el regreso de Jesucristo al final de los tiempos. Nuestra Iglesia los tiene a muchos de ellos registrados oficialmente (canonizados). A éstos y al resto, no canonizados, que son legiones, los venera y los recuerda especialmente en su festividad del día de todos los santos (1ª de Nov.).
Cuando un católico ora al Altísimo,lo hace por medio de nuestro único Mediador: N.Sr. Jesucristo y si invoca a sus amigos del cielo, los santos, ya no es una sola oración la que se presenta por medio de Cristo al Padre Dios, sino varias, en este caso, la del fiel católico y la de sus hermanos santos de la Iglesia Triunfante del cielo.
Si todo cristiano, católico o no, confía en que sus hermanos en la fe que aún peregrinan en esta Tierra pueden orar unos por otros con eficacia, ¡ con cuanta más razón, lo harán nuestros amigos del cielo ¡ Realidad que proclamamos creer y practicar cuando proclamamos en el Credo “ creo en la comunión de los santos “
Autor: José Leopoldo Fierro
Fuente: Luxdomini.com